Escatologismos?

Prólogo

Mirá que hay tardes de mierda, eh? Literalmente hablando, nada de aforismos, no estamos para esas cosas: este es el siglo XXI, damas y caballeros!!


Capítulo I - Lunes a la noche, lluvia torrencial, peli con amigo (impresionante ver pelis del tipo "la gran estafa" con Alber, cuya capacidad de asombro se encuentra 100% intacta)

Saldos: una cachorra muerta de frío, una collie que la saca cagando del colchón porque "es mi cama, intrusa" (este asunto ya se solucionó, veremos más adelante cómo llegaron a una amistad basada en una "situación de mierda") y un arbolito doblado la mitad en el medio del patio por el tremendo "chubasco".

Capítulo II - Martes a la tarde, decisión determinada de levantar al pobre arbolito antes de que se vaya la luz del día (nota mental: comprar el repuesto para el reflector - si, gordi, sorryame que tengo reflector - del patio que sino no se ve un sorcho y cuando saco a la perra de noche no sé si hizo pis o no), búsqueda y recopilación de herramientas, a decir: hilo, estacas de madera previamente adquiridas y afiladas en maderera amiga (las cuales finalmente quedaron para salir a matar vampiros gigantes), silla, escalera, pala, martillo, tijeras y escarpelo (bueno, escarpelo no, pero siempre quise decir: "tijera, escarpelo... oh, no!! fibrilación!! etc etc)

Ahora bien, recordemos que en la casa cohabitan dos caninas de la especie perruna (una de ellas, la mayor, acaba de apropincuarse a mi escritorio, la llené de besos y apretujos, bufó y me miró diciendo: "nena, que densa, para qué tenés una cachorra? andá y apretujala a ella, a mi haceme mimos nomás") cuyas necesidades fisiológicas, léase pis y caca, son depositadas en las superficies aledañas al arboliten.

No hace más que pisar el pasto mi hermanillo menor (el ahora veinteañero) que le digo displicentemente "ojo, no pises ningún regalo". Señoras, señores, señoritas, muchachos de pantalones cortos, aparentemente tengo el poder sobrenatural que hace que apenas yo diga "no pises mierda" alguien la pise. Así que el pobre muchacho se subió a la silla a martillar la estaca y al bajarse para buscar el martillo (bueno, nadie es perfecto, el chico está tratando de dejar de fumar, un toque de empatía, please) vimos el pisotón con cacona en el apollatujes de dicha pieza mobiliaria. No desesperen, es una silla de plástico, no fue taaan grabe tampoco.

Acontecido lo dicho, me dirigí con mi mejor cara de ocote a la búsqueda del rastrillo y pala para levantar TODOS (no los aledaños al arboliten, a ver si me captan, to - dos) los desperdicios fisiológicos de mis niñas de las zonas "pastales".

No fue suficiente conque yo me dedicara a una tarea de mierda como esa, otra vez literalmente hablando, sino que las chicas en ese momento empezaron a disfrutar de una súbita amistad de atardeceres corriendo al rededor mío, volándome la pala y el rastrillo cada 5 minutos (junto con ello unos hermosos dispendios de popós) y lo peor, al rededor de la escalera a la cuál se había subido mi hermaniten.

Pero, claro, a mamá mona bananas verdes, NO! Si me propongo remover la mierda, yo lo cumplo: vote por nani!! Así que seguí inmutable, terminé con la misión auto asignada a mi persona y me apropincué a mi señora madre para seguir levantando el arboliten, porque el martinciten se había retirado.

No hago más que subirme a la escalera para clavar un clavo en la pared (las estacas caducaron, plan B YA!) que me giro para tomar el martillo que me alcanzaba mi madre (no, no me lo olvidé, lo tenía ella porque recién se bajaba de la escalera, yo no fumo)...

Y ahí las veo a las dos, no una, las dos perras, una al ladito de la otra, con cara de felicidat y complicidat acccsoluta haciendo sendas tortas de bosta descomunales. Bueno, la de Olivia no tanto, pero porque no le da la pancita a la ñiña de 48 días, que sino...

Epílogo: Miércoles a la tarde

Así que ahí tienen... Eso, populacho de mi alma, es una tarde de mierda. Mis perras han fundado una hermandad al rededor de la bosta y me han informado del hecho de la manera más escatológica posible.

Yo mientras seguiré con mi palita y rastrillo, cantándole a la vida y levantando cacona con la felicidad que todo amo de canino disfruta. Porque, convengamos, las deposiciones son una soberana cagada, pero las pichichis son lo más!!!!

Y si a vos te dio asco todo esto que escribí, sorry, el título avisaba, la próxima buscá el significado de escatológico en el diccionario, mami :P