sábado, julio 16, 2005

Epístola II: Declaración de NO amor

A quién corresponda.-

Yo no puedo curarte, no te puedo emparchar. No quiero ser un remiendo momentaneo, una venda provisoria, un cabestrillo hecho con pedazos de camisa vieja.

Tengo tanto para mostrarte, para darte y para que me des. Hay tantas formas distintas de querer y quisiera aprender a inventar una nueva con vos. Si pudieras cerrar los ojos para verme como soy. Si pudieras apagar la mente para entenderlo mejor.

Tengo mil secretos que contarte y mil uno que escuchar. Tengo cosquillas, risas, besos, abrazos y lágrimas y tristezas. Podrías simplemente aceptarlas como vienen y dejarlas entrar.

Quiero que me enseñes a extrañarte y a besarte y a saberte tocar.

No te pido que me ames, ni te pido que lo intentes. Solamente que no lo evites. Que si quiere, lo dejes sorprenderte. Que se meta por una puertita que ni sabías que estaba, cuando menos lo esperes y en el momento más inoportuno.

Por ahi a mí también se me falcea una cerradura y terminamos en el mismo cuartito, quién te dice?

Contal no cuesta nada... sólo cuesta intentar.

atte,
yo

pd: se agradece acuse de recibo

1 Divagues ulteriores:

At 7/18/2005 10:30:00 p. m., Blogger pulga atómica opinó...

no era un palo, era una invitación :/

 

Publicar un comentario

<< Home