Quién apagó la luz?
Hoy amanecí al rededor de las 13 hs (bueno, en realidad me desperté a las 11.40 y recién a esa hora me levanté)
Aparentemente, se trataba de un domingo cualquiera, con menos onda que un pelo pero un sol radiante y alentador.
Vestíme, lavéme los dientes, fuíme al baño, bajéme, híceme un te y sentéme a la computadora a chatear con mi madre. Estábamos hablando de un par de asuntos domésticos (conversación que no vale la pena reproducir) cuando mi papá le robó la pc a mi mamá 2 minutos (como siempre, él cree que se la roba y ella se lo deja creer) y cuando volvió mi señora madre PUM!
LIGHTS OUT (cortóse la luz, de más está explicarlo)
El único sonido que se escuchó (luego del fiummmmmmm de la pc al quedarse sin chispa de vida momentánea) fue un: “Se te cortó la luz? me cago en los de EDEMSA, ya me tiene podrido, etc etc” (les presento a mi hermano Tato...) bajando por la escalera, a lo que la perra respondió corriendo hacia la puerta como si viniera el hombre de la bolsa a buscarla. A veces tiene reflejos que me hacen sospechar que no sólo es una rubia hueca con ansias de super star.
Ante el no retorno de la flama de vida que alimenta mi artefacto de adicción (léase pompus) me predispuse a armar mis planes para el día: mandé un par de mensajes por el celu (que no fueron respondidos como de costumbre, aparato del demonio, lo odio, lo único que tiene lindo es el perrito de la pantalla) y diagramé el siguiente esquema: almuerzo, ducha, supermercado, lo que dios quiera si para entonces no volvió la luz.
Pero atención!! Qué hay que hacer en momentos de crisis para no entrar en pánico? Hacer una cosa a la vez (lo cuál también es sugerible en cualquier momento, como para no meter el pan en la heladera y la mano en la tostaroda) Así pues, saqué una deliciosa porción de tortilla de espinaca de la heladera (... <--- puntos suspensivos cargados de ironía) para comenzar con el ítem uno: almuerzo.
De más está aclarar que cometí la idiotez de meterlo en el microondas, tratar de apretar un par de botones, pensar "qué le pasa a este coso?" Ir hacia la tecla de la luz porque no veía un sorcho en la cocina y recién ahí decir: "bien, coty!!"
Prendí una hornalla (con fósforos, porque el tiqui tiqui no funciona sin luz, viste?) y puse mi tortilla en una sartén. El resto del almuerzo pasó sin penas ni glorias, dado que para ello necesito solamente un plato, cubiertos, la comida y mi persona. Obvio que agarré el control para ver la tele, pero antes de tocar ningún botón me subconsciente dijo: "mariana (porque mi subconsciente me dice mariana cuando me voy a mandar alguna) el microondas y la tecla de la luz no fueron suficiente? vas a seguir haciendo papelones delante de los ancestros que te observan desde el más allá?" Así que solté el control y comí.
Item dos: baño. Detalle nro 1: en el baño no hay ventanas. Comentario: en el baño de mamá si. Detalle nro 2: en el baño de mamá hace mucho frío. Conclusión, me lavo la cabeza y cuando vuelva la luz sigo con la ducha. Véanse satisfechos, porque han sido testigos del funcionamiento de la mente femenina. Nada más que agregar.
Item tres: el supermercado. Me puse los lentes de sol, la campera y partí al super. Por la calle había más gente que de costumbre, veredeando más que nada. Juntitos de a dos y a tres charloteando, todos comentando que por ahí la electricidad había decidido hacer paro o le había dado gripe (la gripe del embole capaz, tema estudiado por mi querido amigote elulino y yo, del que en otro momento me explayaré). Seguí caminando y al llegar a una calle con semáforos lo veo al diariero de toda la vida parado ahí, que me mira con cara de hindú que limpia los pisos en las terminales de aviones, esperando ver cómo me resbalo por despiste. Sí! Los semáforos tampoco andaban y él lo había descifrado mucho antes que todos los demás. Él era el único que podía afirmar fehacientemente: "Sí, yo lo vi, cuando se cortó la luz, también se cortaron los semáforos. Ahora, cruce ahora, yo le hago seña a los autos". Y así Don Juan se sentía héroe barrial por un ratito.
Entré al super que de más está decir tiene energía propia, porque es Super Vea, superhéroe mítico mendocino, qué te pasa? agarré el changuito y me adentré en esa tierra que me pone la piel de gallina y los pelos de punta (un cuadro indeseable para cualquiera). El consumismo no es para mí, en fin.
De cortina musical: Luis Miguel cantando boleros. Mi mente me dice: “nada bueno puede salir de un supermercado con luces semi apagadas, con gente dando vueltas sin comprar nada solamente porque necesita ver focos prendidos y con boleros cantados por Luis Miguel”. Un señor pulía los pisos con una máquina, ostentando la electricidad fraudulenta de la que era portador y un par de viejitas lo seguían con la mirada, no se si pensando en qué afortunado era o en los destrozos que harían ellas con su parquet de tener uno de esos chiches en su casa.
Hice la cola, pagué lo que debía y lo miré al cajero con cara de: "no hagas más chistes, porque no te salen" (bueno, che, el chico dijo: "vamos a salir todos bailando con estos boleros" y le hizo una sonrisa de carna patética a la mina que venía atrás mío). Agarré mis bolsas y partí hacia mi hogar. En la esquina seguía Don Juan con cara de felicidad incontenible, sin poder creer que el corte de luz se sostuviera tanto tiempo y la gente precisara de su "si, cuando se cortó la luz, se cortaron también los semáforos". Hice uso de sus servicios, porque pobre de mí si hubiera cruzado la calle sin sus indicaciones y seguí camino.
Al llegar a casa el primer comentario que escuché fue: "todavía no volvió la luz, en lo de Juampi no hay y en lo de Ana tampoco" Señores, está confirmado: la luz se dio a la fuga y ahora encima se está nublando.
Ordené las compras, teniendo cuidado de llevar lo que iba en la heladera todo junto para abrirla una sola vez (si, de vez en cuando la neurona me funciona) y me fui a sentar al sol en el patio porque dije: "bueno, si no puedo aliarme con la tecnología, me entrego a la Pacha Mama". Saqué una silla al patio y me puse lo más pancha al sol. En ese momento pensé: "la gordis ya no está para tomar sol conmigo, necesito un perrito urgente..." La melancolía de los domingos es inevitable, qué le vamos hacer.
LIGHTS IN (volvióse la luz, tenía que aclararlo?)
Así es pues, que Pacha Mama no me aceptó, me mandó de un chispazo de vuelta para adentro. Prendí la compu y me puse a escribir, mirando de reojo permanentemente el titilar del modem que no se decide a conectarse a internet. Así que aquí estoy, con una experiencia de vida que contar y sin manera de comentársela al mundo.
Soy una sobreviviente! Yo viví un apagón un domingo al medio día y sobreviví! Se puede, damas y caballeros, aunque usted no lo crea, algún gen de nuestros antepasados ha quedado en nosotros y aún hoy es posible que soportemos una hora sin electricidad. Y ella se ve que se dio cuenta de que todavía no es tan necesaria o por lo menos la engañamos lo suficiente, así que decidió volver. Al fin y al cabo es mujer y sabe que la vieja táctica de desaparición momentánea sirve para ser extrañada.
nota: internet volvió 2 hrs después casi, nani al borde de un ataque de nervios :P
2 Divagues ulteriores:
Esto me hizo a acordar cuando se le habia descompuesto el televisor a Susanita y ella decia: "Anoche descubrí lo aburridos que pueden ser mis padres"
susanita, qué personaje
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